extravío
resulta que esta mañana al llegar a amsterdam62, seguí con el ritual cotidiano: subí a mi cuarto de azotea, me despojé de mis anteojos, me desvestí y bajé a darme un baño. Regresé para preparme y salir corriendo a la oficina. Pero, sorpresa, mis lentes desaparecieron. Treinta minutos. Nada. Repasé una y otra vez, la entrada a mi habitación. Observé la colocación de los objetos sobre los muebles. Abrí los cajones. Nada. Nada. Nada. La desesperación empezó a marcar mi rostro. Enojo. ¿Dónde están? es sólo una habitación pequeña. Busqué en el piso, en el interior de mis zapatos, de los tenis. Nada. Nada. Nada. Tengo 6 o 7 pares más. Pero, yo quiero mis lentes de pasta azul. Si alguien los ha visto. Digan dónde. Ofrezco: agradecimiento eterno.
--sbc
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